Simona Dalvian

Me cortaron, quemaron y mancharon el cabello, servicio negligente, pésima atención y personal. Hace un par de semanas asistí a la sucursal de Simona Dalvian, esto por unas recomendaciones, gran error. Fui en su momento un día viernes y mostré en especifico que me quería realizar, hicieron una evaluación de mi cabello y pregunté específicamente si se podía llegar a eso, a lo cual me responden que sí, pero que la persona que me atendió (Gonzalo Villarejo) me señala que el no viene hasta el martes, por lo que agende específicamente ese día para que me atendiera él, quien se supone es un experto en color. Adicionalmente, me hicieron una cotización de Balayage en 55.000, aclaro ya conocían el estado de mi cabello y mis expectativas. Llegado el día martes me encuentro con la sorpresa que pese a estar Gonzalo allí no me atiende, ni siquiera se acerca a explicarme la situación, y me recibe otra peluquera (una mujer de unos 40 años, rubia y de pelo corto) a quien tuve que volver a explicarle desde 0 que me quería realizar, reviso nuevamente mi cabello y me dijo que me habían explicado mal y que lo que me iban a realizar para llegar a ese resultado es una babylight y no Balayage. Estuve aproxidamente unos 5 horas en la peluquería, al final la mujer me dijo que tenía el pelo muy dañado y que recomendaba cortar así que acepte. Al terminar el trabajo me pregunta si me gusto y le dijo exactamente que “no, yo quería el cabello rubio y esto es naranja” y ella me responde que es imposible llegar a ese tono porque se me iba a caer el pelo (situación del todo terrible porque antes de hacer cualquier cosa pregunte si se podía llegar a ese tono y me dijeron 2 peluqueros del lugar que sí). Estaba muy disconforme, pero me pare y pague, sin embargo termine pagando casi 70.000 porque me cobraron un lavado y el corte (el cual solo acepte ante la insistencia de la peluquera al ella quemarme el cabello). Evidentemente el trabajo era horrible, me dejaron el pelo quemado, naranja y manchado, por lo que mi novio les escribe para una solución, a lo que la encargada reconoce el error y pide volver al día siguiente para así poder arreglar el terrible trabajo de su peluquera. Al día siguiente voy al lugar y me atiende Gonzalo, quien me pide las respectivas disculpas y me dice que va a tratar de arreglar y cito “las manchas que te dejaron”, luego cuando me estaba lavando el cabello llama a su compañero para reírse y mofarse del trabajo de la peluquera que me daño el cabello, cuando el otro sujeto se acerca pregunta muy asombrado quien hizo eso y Gonzalo contesta que fue su compañera y que no entiende que hizo, a lo cual ambos se ríen de forma nerviosa. Me volvieron a decolorar, cortar y me hicieron un mensaje (el cual me dicen que me van a “regalar”, concepto del todo erróneo porque no me regalan nada, solo están arreglando un horror de trabajo que habían realizado en el mismo lugar). Al terminar mi cabello ya no presentaba manchas en la parte de arriba, pero si en el resto del cabello, quedando así con 4 tonos distintos en mi cabeza y con el cabello muy muy quemado. Me siento muy disconforme, más aún cuando tuve que, al llegar a Chile, desembolsar la suma de 200 dólares para que me arreglaran el pésimo y mediocre trabajo que me hicieron en esta peluquería. Es tal mi molestia que hable la situación directamente en el consulado de Chile quienes me ayudaron y siguen gestionando las denuncias correspondientes realizadas ante la FeNTPEA (Federación Nacional de Trabajadores de Peluquería) y ante la Dirección de Defensa del Consumidor. Adicionalmente, me recomendaron (lo cual estoy gestionando en estos momentos) llevar el asunto a la justicia con una demanda por mala praxis. No sólo no recomiendo esta peluquería, sino que me encargaré que paguen el daño que hicieron. Cabe recalcar que no me devolvieron en lo absoluto mi dinero y desde asistir allí se me ha caído el pelo en cantidades exhorbitantes.

Me obsequiaron en Simona una gif que contenía peinado serviic de uñas de pies y manos que lo iba a utilizar para el 09/11, fecha de evento de mi cumple de 50. El 8/11 en la siesta me informan desde Simona Dalvian que debido a que se ha enfermado una empleada me reprograman para la próxima semana el turno. Un desayuno absoluto carente de sentido común, de respeto y trato digno al cliente, fui personalmente al local, la cara de las empleadas de no hacerse cargo de nada, de cero empatía con el cliente arruinando la previa de un evento, porque particularmente yo lloraba frente a tanta cara de nada. Tuve que buscar quien reemplazara estos servicios a último momento. Recibí respuesta de la dueña Pero el nel momento nadie lo suple, no pueden ser tan poco profesionakes, aunque se disculpo la dueña y me reintegro mi turno decidí no volver y exponer mi cabello, manos y pies a personas tan desatinadas e imperitas. Lamento por la dueña quien ha efectuado una gran inversión en estructura, arquitectura y diseño pero el personal es deplorable, altivo, subestimador, indolente, antipático, incoherente y carente de sentido común.

Me hice masajes a 4 manos con Anto y Karen, increíble lo super recomiendo, muy amables y los masajes increíbles

Fui a la barbería. Muy bien Amir (un 10). La estrella que saco es porque no tienen bacha en sector hombres y no puede trabajar y lucirse más. Se mejora

Excelente lugar me atendieron por watsapp super bien y además muy bueno el servicio y el corte